sábado, 14 de abril de 2012

PEQUEÑA GRAN INTRODUCCIÓN AL MUNDO DEL INTERIOR

Hola chicos,
Siento la tardanza en volver a publicar, espero que este excelente articulo escrito por scarsfi (antiguo y respetado moderador de los foros de lamarihuana.com. Muchas gracias por tu aportación, y muchos saludos desde aqui. allí va:


Esta guía incluye:
-Nociones sobre el cultivo interior.
-El lugar y lo necesario para el cultivo.
-En los primeros pasos... cuidado, no tropezar.
-La siembra y la cría para cosechar.
-Instrumentos de cultivo avanzado.
-Plantar dentro y crecer fuera.

Y ahora mi recomendación, es que te hagas un porrillo y te deleites con la lectura.

NOCIONES SOBRE EL CULTIVO INTERIOR

Toda planta crece a partir de cuatro factores elementales, que son luz, agua, nutrientes y aire. Antes de que se inventara el cultivo en invernadero, y luego en interiores, estos elementos dependían enteramente del clima y la tierra, complementados por el cultivador con alguna especie de abono; en el caso más elemental, los restos secos de la cosecha previa se queman, para usar esa ceniza como fertilizante (ya que contiene calcio y potasio). Pero veamos los factores uno por uno, ya que ese repaso permite describir las pautas y el instrumental en juego.

Primero, se hizo la Luz:
La luz es imprescidible para producir clorofila e hidratos de carbono; sin ells, el follaja se vuelve amarilo y la planta muere. No obstante, el mundo verde sólo usa parte del espectro luminoso, y sobre todo las longitudes de onda que vemos como azul y rojo.
La agricultura estuvo muy limitada hasta descubrirse lámparas casi comparables a la luz solar en intesidad y con el debido espectro de color, pues sólo entonces pudo comprobarse que las plantas agradecen su fotoperíodo (este es, una proporción diaria de luz y oscuridad) muy superior al proporcionado por el sol en estaciones distintas del verano; concretamente, sabemos hoy que su tasa máxima de crecimiento acontece cuando recibe 18 horas al día de luz (dos más que el 22 de junio en nuestra latitud), y sabemos también que el florecimiento es ótimo cuando en esa etapa de su vida recibe 12 horas.
Por supuesto, si la fuente lumínica es artificial, no hay nubes, niebla, tormentas o accidentes del terreno que atenúen su recepción durante la jornada; todo el problema de sustituir o complementar (si se trata de un invernadero) idóneamente al sol se zanja situando el foco lumínico a una distancia conveniente de la planta.
Si está demasiado lejos, se estirarán como delgados filamentos en vez de crecer homogéneamente, y si está demasiado cerca quemará las partes más próximas, traumatizando a la planta. Dependiendo de los vatios de cada bombilla, la distancia idónea para las lámparas más potentes estará entre los 30 y 60 centímetros.
Naturalmente, cuando la fuente de luz es fija y única, como una bombilla en el techo, las plantas desarrollarán mucho más sus partes superiores, y mucho menos el resto; eso sucede ya a cielo abierto, aunque en medida bastante menor. De ahí que una buena instalación suponga también focos horizontales (o uno móvil) de menor intensidad, para alimentar a las partes medias e inferiores. Para el culitvador interior los verdaderos límites están en el calor y, finalmente, en el espacio disponible, porque las plantas se deleitan absorbiendo tantos lúmenes como queramos, pero las bombillas no deben rebasar ninguna de sus partes, y la temperatura del cuarto no debe rebasar ciertos niveles.

Segundo, El Agua:
El flujo de agua, es tan esencial para una vida vegatal como la luz. Los capilares de la raíz absorben agua, nutrientes y oxígeno del suelo, transportándolos desde el tronco hasta las hojas. Parte del agua se emplea para la fotosíntesis, mientras otra parte devuelve a la raíz azúcares y almidones producidos por la planta. En agricultura tradicional, uno de los problemas, especialmente en el caso de plantas pequeñas, es demasiado riego, que pudre la raíz y corta el suministro de oxígeno hacia los tallos.
Sus síntomas son Hojas rizadas y amarillentas, suelo empantanado, hongos y desarrollo lento. Pero la hidroponía avanzada, hecha sobre medios no terrosos, suprime esa molesta posibilidad; cualquier exceso de agua va siendo drenado, al resbalar sobre materiales como lana de coco o arcilla expandida, según veremos. El problema contrario, la falta de riego suficiente, es una plaga milenaria para todo tipo de campesinos, que se agrava en función de algunos suelos, incapaces de retener la humedad.

Tercero, Los Nutrientes:
Se conocen hoy 16 nutrientes necesarios para la vida vegetal, que suelen clasificarse en tres categorías: macronutrientes, micronutrientes y oligoelementos.

Macronutrientes:

  • - Nitrógeno (N): es esencial para el crecimiento vegetativo de la planta y la formación de tejidos nuevos, pues regula la producción de proteínas y es primario en el crecimiento de hojas y tallos, por lo que las carencias rápidamente se manifiestan. Este mineral es el que acostumbra a faltar más en la tierra, pues sus sales son volátiles.
  • - Fósforo (P): se utiliza en la formación de flores y raíces, y en la transferencia de energía solar a compuestos químicos. Es necesario, principalmente, en las primeras etapas de crecimiento y en la floración.
  • - Potasio (K): es esencial para que la planta pueda extraer el agua del suelo y asimilarla mediante un proceso de osmosis. Sin este ión, la planta no podrá absorber los demás nutrientes del suelo. También esencial para la producción de azúcares y almidones, así como para la división celular.

Micronutrientes:

  • - Magnesio (Mg): es un elemento imprescindible para las plantas, los seres humanos y los animales. Para las plantas, es un ladrillo con el que fabricar clorofila, el pigmento de las células de las hojas que les da su color verde y, en consecuencia, es esencial en la transferencia de energía en la planta.
  • - Hierro (Fe): vital para la vida animal y vegetal. Cumple importantes funciones en el metabolismo de la planta y resulta esencial para la síntesis de clorofila.
  • - Azufre (s): necesario para fabricar muchas proteínas, hormonas y vitaminas, tales como la vitamina B1. Aparece en importantes tejidos de la planta, en las semillas y en el líquido celular.

Oligoelementos:

  • - Calcio (Ca): Regula el crecimiento y forma parte de las paredes celulares; los suelos calcáreos suelen producir deficiencias de hierro en las especies no adaptadas.
  • - Cloro (Cl): Relacionado con la transpiración vegetal y la reducción de agentes oxidantes perjudiciales; en la naturaleza no sa han encontrado deficiencias de este mineral.
  • - Zinc (Zn): Intervien en la síntesis de auxinas; también está relacionado con el corercto funcionamiento de varias enzimas.
  • - Molibdeno (Mo): su actividad está relacionada con la asimilación de nitrógeno atmosférico y la reducción de los nitratos a nitritos aprovechables.
  • - Manganeso (Mn): Relacionado con la respiración celular y la fotosíntesis.
  • - Cobre (Cu): necesario para la síntesis correcta de las proteínas, forma parte de diversos compuestos enzimáticos.
  • - Boro (Bo): Relacionado con el trasnporte de azúcares a través de la planta, también se ha especulado sobre una posible relación con la fabricación de RNA y ácido giberélico.
Distinta absorcion de nutrientes a distintos pH.

Cuarto, El Aire: 
El aire respirable para animales en general, incluyendo a nuestra especie, es un regalo del mundo botánico. A través de sus estomas (poros microscópicos de las hojas), las plantas absorben anhídrido carbónico y oxígeno, pero devulelven mucho más de lo segundo (salvo durante la noche), cosa que hace la atmósfera respirable para el animal. Como el animal hace lo contrario, exhalando ante todo anhídrido carbónico, la atmósfera es respirable para las plantas.
Esta estrecha complementariedad sugiere de inmediatp un inconveniente grave para cualquier jardinería de interior. Las plantas necesitan aire fresco, que salvo en zonas altamente castigadas por la polución, resulta mucho más abundante a cielo abierto. Por otra parte, a cielo abierto pueden producirse tosa suerte de meteoros destructivos ( granizo, heladas lluvia excesiva o demasiado fría), entre los cuales destaca el viento, capaz de secar, aterir y hasta quemar las plantas.


EL LUGAR Y LO NECESARIO PARA UN CULTIVO INTERIOR
Lo primero que necesitamos para instalar nuestro cultivo es un lugar adecuado; es interesante que sea una habitación interior, de fácil limpieza y lo suficientemente discreta para que pase desapercibida si viene alguna visita inesperada; trataremos de evitar los garajes por ser muchas veces lugares sucios y polvorientos, aunque si no hay otro remedio podemos fabricar o comprar un armario para que las plantas no estén en conatcto con su malsano ambiente; asimismo es poco conveniente instalar nuestro cultivo en buhardillas o cuartos trateros, pues estos suelen estar situados e el exterior de las casas y están muy expuestos a las inclemencias del clima; es decir, suelen ser demasiado fríos en invierno y demasiado calurosos en verano.
Evita también Habitaciones con grietas, suelos con cemento, o con muchos recovecos, que dificulten su limpieza o puedan permitir la entrada de insectos.
Es importante el contar con una toma de agua cercana, así como un desagüe; no es tan imprescindible pero nos facilitará las cosas a la hora de la extracción.
En mi modesta opinión, el cuarto ideal es un aseo, despensa o cuarto de planchar que esté en desuso en el interior de la casa, eso sí, suelen ser pequeños, así que si estás pensando en hacer un macrocultivo, olvídalos y ve directamente a por uno de los dormitorios.
Una vez seleccionado el lugar, comenzaremos por limpiarlo a fondo, y tapar cualquier grieta o resquicio donde pudiera acumularse suciedad, entrar luz o servir de refugio para las plagas. Ahora empecemos a hablar de los materiales y su instalación:

Materiales necesarios
Al iniciar una plantación desde cero, se ha de contar con un mínimo de materiales básicos, así como con un ambiente adecuado y un buen espacio, que puede ser un armario o similar, aunque en estos casos la producción que obtengamos será escasa.
Aquí os pongo una lista de materiales; los imprescindibles están señalados como tal; los secundarios o de los que podríamos prescindir en un primer momento están colocados en su apartado correspondiente; un buen cultivo los necesita todos, pero por cuestiones de economía, a veces toca prescindir de alguno.

LUZ ARTIFICIAL (Imprescindible):
Uno de los pilares básicos es la luz. Si es de fluorescente, Grolux o similares, sólo será realmente efectiva para enraizar esquejes (durante 24 horas de luz contínua). Para las plantas nacidas de una semilla, esta luz no será suficiente en la madurez de su crecimiento; se deberá usar la que más se asemeje a un pequeño sol; sería cualquier equipo de sodio o vapor de mercurio, de 400 o 600 vatios; pero esto en un pequeño espacio generaría mucho calor. Cada uno de estos focos necesita un espacio de 2 x 2 metros más o menos. Sin duda, la luz es la principal necesidad de todas las plantas y la mayoría de las veces no se le da la importancia que se debe, sobre todo cuando nos referimos al cultivo de interior o con luces artificiales. En principio cualquier luz eléctrica sirve para que una planta pueda "vivir". Fijaos que digo "vivir"; de ahí a que esa planta se desarrolle y madure como lo haría bajo la luz del sol, va un mundo. Se han realizado estudios que demuestran que la planta del cannabis se desarrolla de manera óptima (durante el período de floración sobre todo) a partir de los 40.000 lúmenes por metro cuadrado. Actualmente hay toda una gama de lámparas que pueden dar buenos resultados, según sean nuestras necesidades; bien sean de espacio o de coste y producción, optimizando así el medio en el que vamos a trabajar.
  • Fluorescentes: Las primeras lámparas útiles en agricultura fueron las de flúor, cuyo espectro es casi idéntico al solar, aunque les falte brillo para elevar sustancialmente el desarrollo de plantas hechas a mucho sol. Para jardinería de interior suelen usarse fluorescentes de rendimiento muy alto o VHO ( very high output), que si bien consumen el triple de electricidad rinden el doble de luz y resultan muy útiles para lograr que arraiguen esquejes, ya que el proceso de clonación está más expuesto al riesgo de abrasamiento por luz excesiva. En los inicios del cultivo interior alcanzaron gran popularidad los tubos fluorescentes, pues, comparados con las bombillas incandescentes o de tungsteno utilizadas hasta entonces, producían más luz tanto en gama del espectro azul, como en la gama de rojos, incrementando así el proceso de fotosíntesis de las plantas. Actualmente los fluorescentes son muy usados en preparar semilleros ( para germinar semilla), para enraizar esquejes ( hacer clones) y también en las primeras etapas del crecimiento vegetativo. Hoy en día, existen en el mercado una gama bastante amplia de tubos fluorescentes cuyo espectro, tento en azules como en rojos, es ideal para nuestros propósitos; por ejemplo: Grolux (Sylvania), un clásico; trifosforados (Sylvania, Biolux, Osram), pueden llegar a producir el doble de intensidad lumínica con el mismo consumo, y toda una variedad de tubos pensados para plantas de acuarios, que nos pueden ser muy útiles. Hay que tener en cuenta que, si queremos cultivar únicamente con fluorescentes, necesitaremos mínimo de 150-200 vatios por metro cuadrado para empezar a optimizar nuestro cultivo de interior.
  • Vapor de Mercurio: Los tubos fluorescentes fueron un sinónimo de éxito en lo referente al cultivo con luz artificial. Pero esto fue así hasta que se empezaron a imponer las lámparas de vapor de mercurio, pues su potencia y su alta gama de espectro azul y también rojos, pero sobre todo de azules, favorecen, principalmente en el período de crecimiento, unas condiciones más adecuadas para el cultivo acelerado, ya que los cultivos realizados con fluorescentes eran más lentos. La utilización de estas lámparas de vapor de mercurio revolucionó es su momento el cultivo interior, en cuanto a calidad, cantidad y tiempo empleado sobre todo en hacer crecer y también florecer las plantas, bien fuese en invernaderos, garajes o pequeños garjes con un éxito notable. Pero hoy en día, como diría nuestro amigo Jorge Cervantes: "Las luces de vapor de mercurio, serían el abuelo de las lámparas HID (high intensity discharge)". Aún siendo más efectivas que las luces incandescentes, de tungsteno, halógenas y que los fluorecentes, la lámpara de vapor de mercurio es hoy por hoy la menos efectiva de las luces de la familia HID.
  • Halogenuros metálicos (MH) o Alta Presión Sodio (HPS): En cuanto a los halogenuros metálicos (MH), existe un tira y afloja entre los cultivadores (sobre todo en Estados Unidos) sobre si es mejor utilizar estas lámparas o utilizar lámparas de sodio (HPS), tipo agro/Grolux, durante el período de crecimiento.
Hagamos una pequeña comparación: los halogenuros metálicos de baja y alta potencia, pero sobre todo los de alta (a partir de 400 vatios), dan un mejor rendimiento en el ciclo vegetativo que las de vapor de mercurio. Un halogenuro metálico de 400 vatios, puede llegar a dar hasta 100 LPW (lúmenes por vatio); además de una mejor gama de espectro en azules y rojos. La diferencia es grande.
Esta gama de lámparas fue en su día junto a las de sodio, la sucesora del vapor de mercurio. Si contrastamos las luces de mercirio con los Halogenuros metálicos y sobre todo con las de sodio (HPS) actuales, tanto en efectividad, consumo y producción total de luz total no hay comparación. El vapor de mercurio da menos luz y algo más de calor. Resumiendo: las lámparas de mercurio son las que, técnicamente hablando, menos LPW (lúmenes por vatio) producen. Por ejemplo: una lámpara de 400 vatios de vapor de mercurio da unos escasos 60 LPW, mientras que un halogenuro metálico de 400 vatios puede dar, como ya hemos dicho, hasta 100 LPW, y algunos modelos de lámparas de sodio de 400 vatios llegan a dar hasta 125 LPW. Si hacemos cuentas, económicamente hablando, es más rentable y productivo utilizar lámparas de sodio (HPS); la emisión de lúmenes es mayor y el coste es más bajo, y la mayor durabilidad y versatilidad de las lámparas de sodio (HPS) que existen en el mercado actual nos hacen parar a pensar si utilizamos Halogenuros metálicos junto con sdio, o únicamente sodio para todo el ciclo vital de nuestras plantas.
Además hay que tener en cuenta que los equipos de sodio (HPS) son válidos tanto para la fase de crecimiento como para la fase de floración, y por lo tanto no es necesario (en el caso de la lámpara de 400 vatios), cambiar de sistema o lámpara, ya que el balastro o sistema de arranque de vapor de mercurio y de los halogenuros metálicos no es compatible con el balastro de sodio, excepto en algunos casos de equipos ambivalentes; pero estos equipos son muy costosos. Esta polivalencia de las luces de sodio ha significado, de cara al pequeño cultivador, ponerse en poco tiempo en un nivel de producción autosuficiente y una efectividad que no para de progresar.
Dentro de la gama de lámparas de sodio (HPS) las hay de 150, 250, 400, 600 y 1.000 vatios. Hablemos de ellas. Las primeras, las de 150 y 250 vatios, son utilizadas bien para pequeñas o reducidas áreas de cultivo, bien para la zona de crecimiento vegetativo, sea de clones o madres o de ambos a la vez. Algunos cultivadores expertos utilizan estas lámparas en las primeras fases del período vegetativo, para luego finalizar el crecimiento y pasar posteriormente a la floración con luces más potentes de 400, 600 e incluso 1.000 vatios. Continuemos; las lámparas de sodio de 400 vatios hoy por hoy son las más utilizadas, por su capacidad digamos todoterreno, es la potencia a partir de la cual entramos en el terreno verdaderamente eficaz y completo. Con esta lámpara obtendremos la iluminación suficiente para un metro cuadrado de zona de cultivo, cubriendo necesidades, tanto de luz como de distribución de espectro, de manera óptima y eficaz. Si mantenemos las distancias aconsejadas, y dependiendo, eso sí, del mñetodo o pantalla de reflexión que escojamos; "el objeto habrá sido seleccionado", es decir, podemos llegar a conseguir más de un gramo por cogollo seco por vatio consumido de luz, en este caso sería: 400 vatios = 400 gramos (en los cultivos iniciales es normal obtener 0,25 gramos por vatio consumido. No hay que preocuparse, el aprendizaje es progresivo, dependiendo además de la variedad elegida).
La variedad de lámparas de 400 vatios (HPS) es amplia; todas son más o menos parecidas, casi todas tienen más o menos las mismas cualidades, lúmenes, espectro, etc. Sólo varía la durabilidad; pero hay un par de modelos que vale la pena destacar, que son la lámpara de 400 vatios (HPS) Son T-Agro de Philips y la T Grolux de Sylvania. Estas lámparas emiten, entre un 20% y un 30% más de espectro azul que las lámparas de 400 vatios de modelos estándar. Tambié, producen entre un 5% y un 6% más de luz total, lo que las convierte en ideales para cultivadores aventajados, pues ese porcentaje de más de gama de espectro en azules es óptimo para el período de crecimiento de las plantas, a la vez dan más rendimiento que las bombillas estándar. Estas lámparas son usadas de varias formas: como lámpara de crecimiento (ciclo de 18 horas) y a la vez en floración (ciclo de 12 horas) sin necesidad de cambiarla en el momento de cambiar el período de floración; y también como lámpara de crecimiento (18 horas), cambiando durante el período de floración (12 horas) por una de 400 vatios del tipo T-Plus de Philips o una TS de Sylvanis, ya que esta últimas, al no tenr ese tanto por ciento más de espectro de luz azul, su emisión es más anaranjada y favorece el proceso de floración y maduración de las plantas.
Continuaremos con las lámparas de 600 y 1.000 vatios (HPS). Estamos hablando de los pesos pesados de la famila HID. Las de 600 vatios ofrecen un rendimiento óptimo, ya que pueden darnos desde los 81.000 lúmenes y 135 LPW de la Osram/planta 600w, pasando por los 85.000 lúmenes y 142 LPW de la Sylvanis SHP-TS 600w y de la Philips Son T-Plus 600w; esto las convierte en unas lámparas de alto rendimiento. Así pues, cultivando con estas potencias podemos llegar a obtener muy buenas producciones tanto en cantidad, como en tiempo final empleado. Sólo hay que tener en cuenta un par de cosas: los equipos y componentes, al igual que las lámparas, son bastante más caros y dependiendo de la zona, suele ser más problemáico que si usamos equipos de menor potencia en lo que se refiere al calor, a la temperatura que emiten las lámparas, pues tiende a ser elevada, y en invierno, aún, pero cuando lleguen los meses de mayo y junio... Y no digamos ya en plena canícula. La cosa se puede complicar bastante si no tenemos muy en cuenta el tema de la extracción/ventilación del aire.
Y finalizaremos con las lámparas de 1.000 vatios (HPS). Estas potencias muy utilizadas sobre todo en Estados Unidos y Canadá, pues allí la electricidad es bastante más barata que aquí, lo cual es importante a la hora de utilizar estas lámparas. No suelen ser muy comunes aquí. Como dato, los 145 LPW que puedes alcanzar.

Semillas y Macetas (imprescindibles): 
Lo mejor si eres novato, es pedirle a algún colega que te pase unos esquejes; eso sí, recuerda ser agradecido cuando tengas tu cosecha, que a más de uno el humo del porro le hace olvidar sus amistades. Si no tienes colegas que te los den, lo mejor es comprar unas semillas baratas preferiblemente índicas, ya que por lo general se manifiestan más resistentes (seguro que alguna chapuza les haces   ) y más productivas y rápidas, cosa que en la primera cosecha se agradece bastante.
Las macetas interesa que sean cuadradas para aprovechar el espacio al máximo, aunque esto es mejor hacerlo si vamos a usar esquejes con la técica de Sea of Green,. Si vamos a usar semillas, podemos usar las de los chino, aunque puede que no nos sirvan en el futuro, así que vosotros mismos.

Termómetro (prescindible): 
Un termómetro es útil para verificar si la temperatura es la adecuada. Úsalo si dudas de que lo sea. Lo mejor son sobre los 24 grados.

Intractores/ Extractores de Aire (imprescindibles):
En función de las temperaturas que pueda alcanzar tu cuarto de cultivo, necesitarás uno más o menso potente. Los volúmenes movidos por los ventiladores usados van de 80m3 hasta 500m3. Lo normal de 160m3 a 250m3 (por hora, creo).
Un intractor es un extractor colocado al revés para que introduzca aire fresco en la habitación; si tu extractor es bastante potente, puedes olvidarte de él por el momento, y simplemente hacer un agujero de entrada; debe estar situado en el lado opuesto al extractos, es decir, si éste está en la esquina superior derecha, el intractor debe estar en la inferior derecha. Se debe colocar un filtro en el ventilador de entrada si lo usamos, para evitar que entren insectos nocivos o porquería de la calle. En los ventiladores de salida es interesante colocar un filtro de carbón para neutralizar el olor que puede atraer la atención de los vecinos (pregunta en tu Grow Shop).

Substrato (imprescindible):
Mi recomendación es que comiences con una mezcla de tierra preparada, así te comerás poco el tarro, aunque lo mejor sería prepararla en casa con varios componentes; en el mercado hay muchas lo bastante buenas como para sacar unas cosechas interesantes.
La función primaria de un sustrato ya sea de tipo orgánico o inorgánico, es proporcionar fijación a la planta y un buen ambiente para el crecimiento y desarrollo de las raíces. Se debe suministrar equilibradamente oxígeno, agua y nutrientes a este sistema complejo y dinámico. Las raíces no pueden absorver agua y nutrientes sin oxígeno. Durante el proceso de respiración de las raíces existe un suministo constante de dióxido de carbono (CO2) al sustrato. Se debe permitir escapar a este dióxido de carbono a la atmósfera para que sea sustituído por oxígeno. El CO2, por tanto, es inversamente proporcional al oxígeno y es difícil predecir si el substrato tiene deficiencia de oxígeno o excesos tóxicos de CO2 cuando las plantas no ofrecen un desarrollo adecuado. En general, la mayoría de las plantas requieren de oxígeno en el medio de enraizamiento para su desarrollo normal, cuando por alguna circunstancia los niveles de dicho elemento en el suelo son deprimidos, la actividad respiratoria y metabólica de las plantas se inhiben afectando todos los procesos vitales que determinan su desarrollo de crecimiento.
El establecimiento de estrés oxidativo en el cannabis, se ocasiona por los contínuos cambios ambientales que soportan las plantas, sobre todo por las sequías prolongadas ya sean naturales o inducidas, y puedesn llevar a la pérdida de funciones metabólcas, llegando incluso a la destrucción del tejido, a la vez que puede ocasionar la muerte de la plnata. El cannabis responde ante esto con un crecimiento en la resina para evitar la desecación y con otros mecanismos de defensa fabricando antioxidantes no enzimáticos como las vitaminas (A, E y C) y enzimáticos (catalasa, peroxidasas, etc.).
La utilización de oxígeno en el suelo por parte de las plantas está controlada principalmente por factores físicos. Entre ellos cabe mencionar la cantidad de oxígeno aprovechable y la temperatura. La respiración de las raíces aumenta en gran magnitud a medida que se incrementa la temperatura. Simultáneamente, el coeficiente de solubilidad del oxígeno en el agua decrece, afectando a la actividad respiratoria. Las deficiencias de oxígeno en el cannabis da lugar a modificaciones morfológicas en la estructura de la planta.
Un substrato debe tener unas características básicas para el intercambio de oxíno y retener suficiente cantidad de agua para que la planta asimile los nutrientes y respire a través de las raíces. Cuando el substrato es demasiado compacto o tiene sustancias o materiales que facilitan el encharcamiento y no drenan fluidamente, provocamos el pudrimiento de las mismas. El cannabis tiene un sistema radical muy perezoso y le cuesta abrirse paso ante materiales duros y compactos, por lo que habrá que deshacer los grumos y facilitar la libre circulación de las raíces por medio de materiales sueltos, fibrosos sin compactar. Muchos de estos grumos que no han sido bien desmenuzados en la preparación de los substratos, contienen gran concentración de nutrientes y puedes llegar a quemar las raíces adventicias más delicadas. Los distintos tipos de tierra se han de combinar con otros tipos de materiales orgánicos, como el humus y turbas de buena calidad; no obstante, su utilización para mejorar la calidad de los substratos, ha sido sustituída por otros materiales orgánicos e inorgánicos como la fibre de coco, perlita, vermiculita, lana de roca, otros materiales sintéticos (styromull, hygromull, etc) o incluso arena, con objeto de conseguir un máximo grado de esponjosidad, permeabilidad y retención de agua.
Estos substratos se pueden combinar también con fertilizantes biológicos o químicos para compensar las carencias o las necesidades específicas de nutrientes en el cultivo, siempre en cantidades perfectamente equilibradas.
Las turbas auténticas (generalmente rubias) para el cultivo de cannabis tienen un ph muy ácido (3-4) pero se compensan facilmente con compost y otros materiales para adaptarse a las necesidades de la planta.

Fertilizantes (imprescindibles):
Nuestras nenas comen como limas, y con el alimento del substrato no tienen ni para empezar, por lo que al cabo de un cierto tiempo debemos darles un aporte suplementario de nutrientes mediante el riego; conviene usar algunos que sean completos y equilibrados, y diferenciados para crecimiento y floración, aunque los hay de un solo paso muy buenos.

Insecticidas/ plaguicidas (depende): 
En principio no los necesitarás, y cuanto mejor sea la higiene, la ventilación y extracción de tu cultivo, menores son las probabilidades de que te hagan falta, pero no dejes de obsevar tus nenas, y al menor síntoma de plaga lleva una hoja a tu Grow Shop.

Plástico Reflectante (prescindible):
Es interesante para aprovechar al máximo la luz, refractando la que se pierde por los laterales de nuevo sobre el cultivo; el mejor es el mylar, que parece un espejo y refleja la luz hasta un 98%. Sus pegas son que también refleja muy bien el calor y que es bastante caro, pero si eres de los que quieren lo mejor, usa éste.
En último término, pìntura blanca en las paredes, y si te queda algo sin cubrir, hazte una especie de biombo con una caja de cartón grande. Si vas muy apurado de pasta, puedes prescindir del plástico; sacarás menos hierba pero sacarás de todos modos.

Ventilador (prescindible):
Conviene tener uno colocado junto al intractor o la entrada de aire. El aire en los cultivos de interior tiende a hacer el mismo recorrido desde la entrada a la salida, no necesariamente pasando por tus plantas, por lo que conviene tener un ventilador para que lo distribuya; si no te alcanza la pasta, ya te lo comprarás con lo que te ahorres en pillar por ahí después de la primera cosecha.

EN LOS PRIMEROS PASOS... CUIDADO NO TROPEZAR
Bueno, habiendo dejado claro los materiales que necesitamos, vamos a pasar a los errores más frecuentes entre los novatos; recordad que se aprende más de los errores que de los aciertos, así que si la cagais, aprovechad la experiencia para aprender y no repetirla jamás.
La mayoría de los novatos cuidan las plantas en exceso, ocasionándoles graves perjuícios por tratarlas con demasiado cariño; estos son los pecados capitales del principiante:
El primero de estos excesos es el exceso de riego. Pese a que en muchos sitios hayáis leído que la cannabis requiere abundante agua, en interior no necesita tanta.
Sus necesidades dependen de la temperatura, ventilación, tamaño de la planta y de la maceta; cuando las plantas son jóvenes es cierto que conviene pasarse a quedarse corto, pero desde el momento en que contamos con plantas de un palmo o dos, podemos regarlas y dejarlas sin agua hasta que bajen las hojas (síntoma de falta de riego); si por ejemplo tardaron cuatro días en bajarlas, ya sabes que debes regar cada tres, es decir, dejar que la tierra se seque al máximo sin permitir que la planta pase sed.
Otro exceso es la sobrefertilización; muchos fabricantes recomiendan dosis bajas para asegurarse de que jamás tengas problemas de sobrefertilización con sus recomendaciones, si bien es cierto que a veces estas dosis se pueden aumentar; no lo hagas si eres novato; es mucho mejor que a tus plantas les falte alimento a que les sobre. Asesórate bien y realiza tus experimentos con cuidado, y a partir de la segunda o tercera cosecha.
La hipocondría, pecado fundamental del principiante; si ves una mancha en una hoja, no supongas ya que a tu planta le falta zinc; si amarillea una hoja, no corras a darle una doble dosis de nitrógeno; espera a que los síntomas estén más definidos antes de actuar; recuerda que si has seguido todos los pasos explicados hasta ahora, el mayor problema que tus plantas pueden tener probablemente eres tú, así que la no-actuación va a ser tu mejor arma.

LA SIEMBRA Y LA CRÍA PARA COSECHAR
La germinación de una semilla, cosa que ya todo el mundo debe saber, es su nacimiento, o mejor dicho, la provocación de su eclosión, valga la palabra, que cuando termina cuando los primeros colitedones afloran sobre la tierra. Si el cultivo lo realizamos en interior, no tiene demasiada importancia la éspoca dela año en la que germinemos.
Es posible reconocer semillas válidas (con vida ) entre otras etériles simplemente apretándolas entre en dedo índice u pulgar, con una ligera presión (sin utilizar las uñas). Si están muy verdes, vacías o podridas, se romperán bajo la presión; las que resistan, a menos que sean muy viejas, germinarán.


Cuantos más tipos diferentes de semillas podamos reunir para una tanda de germinación, más disfrutarenos, puesto que al final aburre consumir una sola variedad de hierba. Si disponemos de muchas clases de semillas, conviene que la bandeja que usemos como semillero tenga apartados que podamos etiquetar; las hueveras de plástico funcionan de maravilla, pues crean a la vez una temperatura constante si la mantenemos cerrada.
El material que usemos para retener el agua, que es de lo que se trata, puede ser muy variado:algodón, celulosa, papel de water, o cualquier otro material que sea absorbente y se dehaga fçacilmente una vez húmedo. Algunas veces, el algodón es demasiado consistente a la hora de sacar la raíz que se enreda en su interior, con lo que puede romper.
En las explicaciones que siguen, se usará algún tipo de papel higiénico: se rellena cada uno de los apartados con una base de papel higiénico (6 u 8 capas); mojarlo totalmente sin inundarlo, y a continuación colocar las correspondientes semillas, estrategicamente separadas; volver a cubrir las semillas con papel de nuevo y humedecer para que toda la superficie de la semilla esté en contacto con el agua. Poner la bandeja en la cocina o en el lavabo junto a un grifo y en un sitio donde entremos a menudo, para no olvidar darle una rociada cada día. Si las semillas son buenas y se hace bien, al segundo o tercer día, empezarán a abrirse y saldrán las primeras puntillas de las raíces; cuando esa puntilla alcance un centímetro o dos ( 4º o 5º día), la plantaremos a una maceta con su nombre, al principio pequeña para que crezca más a lo ancho que a lo alto (que no se estire). Más tarde, cuando empiece a amarillear, necesitará un transplante a una macetade 2 litros como mínimo para que pueda definir su sexo.
Por supuesto, éste es uno de los muchos sistemas de germinación. Mucha gente planta directamente la semilla en la tierra y espera que crezca sin demasiados cuidados y con buenos resultados.
Una vez enterradas las semillas, a una profundidad de no más de medio centímetro, las regaremos, sin pasarnos; no es cuestión ni de regar cada media hora ni de mantener la tierra siempre empapada, lo cual sólo contribuiría a que las incipientes raícez se pudran.
Los tiestos los mantendremos en un lugar a la sombra hasta que germinen; una vez nacidas, ya las podemos poner en el cuarto de cultivo bajo la lámpara que usemos, manteniendo una distancia de seguridad y observando como se comportan al cambio de ambiente y a la temperatura.
El transplante en sí no debiese darnos el mayor problema, si lo realizamos con cuidado, la planta no notará la diferencia. Debemos sujetar la maceta por la base con una mano, mientras con la otra cubrimos la parte superior, dejando salir con cuidado por entre los dedos el tallo de la planta, sin apretarlo y con cuidado para no doblarlo ni romperlo, y giramos, dando la vuelta a todo; así, ahora, la planta queda hacia abajo y la base de la maceta hacia arriba. Tiraros con cuidado de la maceta hacia arriba, teniendo cuenta de que el cepellón se desprenda tranquilamente liberándose de ésta, sin deshacérsenos entre las manos. Sujetamos firmemente el cepellón y lo volvemos a su posición original, con la planta hacia arriba, y lo colocamos sobre la maceta más grande que la anterior (previamente pondremos el drenaje y cubriremos con un poco de substrato). Si el tallo se nos ha espigado mucho durante el crecimiento, enterraremos la planta hasta llegar cerca de los colitedones o falsas hojas. 
Si hemos realizado la operación con el debido cuidado, no tendremos el más mínimo problema. Las plantas no sufrirán ni notarán el cambio. Bueno, esto último, si, pues las raíces tienen más espacio para desarrollarse y más alimento al que acceder, y en pocos días, veremos como nuestras plantas comienzan a medrar sin problemas. En cultivos de interior, dependiendo de la intensidad del foco y la distancia respecto a las plantas, se desarrollará la floración. Ejemplo: una lámpara de 400 vatios a 30 centímetros de la cima, producirá plantas de unos 40-50 cntímetros de altura con cogollos generosos; los restantes no serán tan fotogénicos; también el peso de la cima puede doblarlas o tapar toda la luz al resto de la planta, por lo que interesa producir especímenes pequeños.
En los días posteriores seguiremos manteniendo una lámpara de alta presión de sodio de 400 vatios (durante 16-18 horas) a unos 30 centímetros sobre las plantas y una tierra rica, abonada (por ejemplo: humus de lombriz), y algo de perlita para favorecer la oxigenación de las raíces. Será suficiente para que las plantas crezcan como deben con la mínima separación entre niveles o nudos, expandiéndose y no alargándose, desarrollando las ramas inferiores a la misma velocidad que la cima; si esta sube mucho, la solución para que no sobrepase las demás plantas, es cortarle la cabeza, aunque sea muy duro tanto como para principiantes como para los viejos cultivadores; esto no nos debe preocupar, pues se conseguirá una planta bicéfala al cabo de una semana.
Como el riego se produce a poco centímetros de la raíz, el resto aéreo de la planta pide algo equivalente a una lluvia tibia, cosa que se consigue pasando un paño húmedo sobre hojas y tallos, cuando menos una vez al mes, y mejor cada quince días. El sistema de espolvorearlas con un spray es delicado, ya que las bombillas de HID pueden estallar si son tocadas por cualquier tipo de líquido fresco mientras están encendidas; sin especial precaución, sólo procede hacerlo antes de encenderlas, pero entonces topamos con el obstáculo de interrumpir la fase de oscuridad, cosa que perturba su crecimiento.
Más fundamental aún que lavar la planta es conseguir un recinto ventilado, sin estratificaciones en la atmósfera, lo cual exige en primer tñermino mover el aire con algún ventilador de giro. Lo perfecto es complementarlo con una ventana o un simple respiradero y hacerlo funcioar si no contínuamente, sí varias veces al día durante unas horas. En habitáculos cerrados, como un sótano, por ejemplo, será preciso abrir el recinto de cuando en cuando. Si la habitación no es grande, bastarán cinco minutos para renovar el aire completamente.
Cuando la planta tenga la altura deseada, simplemente se reducirá el régimen de luz a 12 horas de luz para inducir el proceso de floración. Estas 12 horas de oscuridad, forzarán a la planta a florecer; es importante que la oscuridad sea total; polución de luz en esos momentos puede evitar que los cogollos se desarrollen correctamente. El uso de temporizadores es obligado, pues los fotoperíodos deben ser exactos.
En cultivos de interior, el proceso final de floración resulta más controlable, pues se sabe que las índicas en 12 semanas están a punto, mientras que las sátivas no acaban nunca por debajo de las 16-20 semanas.
Por eso, estas últimas se desaconsejan, salvo en los casos en que el final de floración coincide con el ciclo exterior tardío, es decir, octubre; las podemos forzar sacándolas al exterior con 11 o 12 horas de luz natural para que cogollen lentamente y así ahorramos bombilla.

INSTRUMENTOS DE CULTIVO AVANZADOS
Un refinemiento adicional incluye generadores de anhídrido carbónico, que sientan a las plantas tan bien como nos sientan a nosotros bombonas de oxígeno puro, y cuyo funcionamiento puede automatizarse con temporizadores. Sin embargo, son artefactos aún caros, y capaces de calentar excesivamente el cuarto. La solución del ahorrativo será buscar otros sistemas para liberar anhídrido carbónico en la fase final de floración, porque aumenta mucho el crecimiento. La marihuana es capaz de absorber una cantidad de anhídrido carbónico (CO2) del aire, en una concentración ucho mayor a la que se encuentra en la atmósfera. El aire contiene un 0.003% de CO2 y las plantas experimentan un aumento del crecimiento de casi el doble bajo concentraciones de CO2 del 0.015%. Aunque el CO2 es incoloro, inodoro y no es inflamable, puede ser peligroso rebasar los límites establecidos.
Recomendable y barato es el desionizador, un generador de iones negativos, que purificará el aire; este elemento produce una atmósfera de frecura, con el aroma típico del campo después de un aguacero, y mejor la salud del jardín al neutralizar hongos, esporas y agentes contaminantes. En realidad, es algo sano también para cualquier otra parte de la casa.

PLANTAR DENTRO Y CRECER FUERA
Es mucho más sencillo adaptar una semilla de interior a exterior que a la inversa . La luz del sol tiene muchos rayos ultravioleta que quemarían a una planta crecida bajo luz artificial, si se la somete a dicho cambio de forma brusca. 
Si por el contrario dicho cambio es hecho paulatinamente la aclimatación será perfecta. Conviene improvisar un pequeño invernadero con plástico o similar hasta que puedan soportar la luz directa. Muchos cultivadores de exterior comienzan la plantación en interiores. Hay semillas aptas tanto para interior como para invernadero.
Adaptar una planta de exterior a interior no vale la pena. Hay semillas aptas para balcones con buenos resultados. El problema del cultivo exterior es que a pesar de que se cultiven grandes plantas, éstas están expuestas durante meses al clima y a las plagas, y sólo hay una cosecha por año.
Al realizar este tipo de cultivo híbrido, se pueden germinar los semillaros antes de la época habitual de siembra en exterior, con lo que se alarga la fase vegetativa de la planta y se pueden obtener individuis mayores que cultivando solamente fuera o solamente dentro. Pero cuidado, si las pasas a la calle demasiado pronto (en febrero o así), pueden florecer.

sábado, 7 de abril de 2012

Guia para cultivar con éxito autoflorecientes


Una semilla de autof se germina exactamente igual que una semilla no autof, existen varios métodos de germinación.

1.podemos germinar en agua: 
Es un método muy sencillo, pero al estar en el agua hay que tener en cuenta cosas como que no puede bajar la temperatura o que no pueden estar muchos dias en el mismo agua o se puede pudrir.Los pasos para germinar en agua son :

  • Cogemos un vaso de agua templada ( tampoco os flipeis y calenteis el agua),el agua preferiblemente destilada y echamos las semillas dentro, después lo colocaremos en un sitio oscuro y cálido( es importante una temperatura que ronde los 25º ambientales)
  • En los días sucesivos comprobaremos que las semillas irán abriendo y mostrando la raíz. Unas semillas pueden tardar mucho más que otras.
  • Debemos cambiar el agua del vaso a los dos días, para que no se pudra.
  • Según nos vayan mostrando la raíz podemos plantarlas en el medio escogido.


2.Para el que no le guste el método del vaso
puede usar el siguiente,para mi es el mas recomendable,ya que es limpio y seguro para los novatos  :


  • Cogemos un plato hondo y ponemos una servilleta o un poco de papel higiénico.
  • Humedecemos con agua (mejor destilada) mediante pulverización, sin llegar a encharcar.
  • Disponemos las semillas encima de el papel húmedo, separadas unas de otras.
  • Las cubrimos con otra capa de papel y repetimos la operación de pulverizar el agua.
  • Cerramos con otro plato igual dado la vuelta y después lo colocaremos en un sitio oscuro y cálido.
  • comprobaremos que las semillas irán abriendo y mostrando la raíz. 
  • Debemos vigilar que el papel no se seque, ya que las plantas morirían, así que no le pierdas ojo.
  • Según nos vayan mostrando la raíz podemos plantarlas.

El siguiente método se puede usar tranquilamente,pero lo pongo al final de la lista porque a mi me parecen excesivamente engorrosos.

3. Sustrato para germinación
Son productos fabricado expresamente para germinar semillas, el más conocido es la lana de roca:

  • Cogemos agua un poco caliente (como ya digo siempre,mejor destilada) y echamos los cubos de lana de roca de tamaño pequeño al recipiente.
  • Dejamos que se empapen bien, los cogemos uno a uno y los apretamos fuertemente con nuestra mano para quitar el sobrante de agua.
  • Hacemos un agujero con un cutter, justo en el medio de una de las caras del cubo de lana de roca que llegue casi hasta el fondo.
  • Introducimos una semilla en cada cubo, a una profundida de medio o un centímetro y los ponemos en un lugar cálido (preferiblemente un mini invernadero).
  • A los pocos día empezarán a brotar las plantas por el agujero . Cuidado que no se seque del todo la lana de roca, ni encharcarla demasiado claro.


SIGUIENTE PASO :
sembrara la semilla,haciendo un agujerito de 1cm y espolvoreando un poco de tierra por encima,obviamente la raiz debe ir mirando hacia abajo,asi le quitamos trabajo a la semilla.
BUENO PUES NUESTRA AUTOFLORECIENTE empieza a asomar y vemos sus cotiledones, la tierra esta húmeda ( no encharcada) ,mejor humedecer la tierra antes de sembrar la semilla porque si regamos encima de la semilla , lo que conseguiremos será enterrarla aún más,mejor humedecer con pulverizador.
¿¿la pongo al sol??? , si , pero poco a poco dale tiempo,unas horitas de luz directa con los cotiledones y cuando asomen los primeros pares de hojas verdaderas,podemos darle todo el sol que podamos.
A partir de este momento cuanto mas sol mas producción.

Hay que tener claro que el factor mas limitante en la producción de las plantas autoF. es su breve periodo de vegetativo, de aproximadamente unos 15-20 dias en casi todas las variedades.
Cualquier percance o falta de condiciones óptimas que la planta sufra en este periodo impedira que la planta se desarrolle correctamente,entonces la planta se nos va a qedar pequeña y por lo tanto reducimos notablemente su producción.
Cuando una planta detiene por algun motivo su desarrollo normal tarda unos dias en recuperar el ritmo, incluso despues de haber solucionadoel problema; siendo en las plantas autoflorescientes el periodo de crecimiento tan breve, un pequeño error puede facilmente detener la planta una semana, perdiendo así un 30% del tiempo util de crecimiento y por lo tanto de cosecha.

Transplantes o sobrefertilización son fatales para estas plantas.
Por lo tanto una de las mejores maneras de garantizar el éxito es empezar directamente en la maceta definitiva, utilizando abonos biologicos mezclados con el sustratos. El humus de lombriz hasta concentraciones del 40% es mas que suficiente, pues nos garantiza nutricion suficiente sin riesgo alguno de quemar las plantas,y sin tener que volver a fertilizar en esta fase .Solamente tendríamos que fertilizar para floración.
En macetas de 7 a 10 litros podemos sacar el máximo.

Una de la grandes ventajas de estas plantas es que al ser corto el ciclo, los problemas por acumulación de sales en la maceta son practicamente nulos. Lo mismo sucede con los problemas de plagas, al ser tan corto el ciclo lo mejor es usar productos preventivos,desde que aparece el segundo nudo podemos aplicar aceite de neem ,de esta forma la planta lo sintetiza y creamos una barrera desde muy pequeña,( aplicar neem en plantas más avanzadas sirve de poco,el neem es un producto sistémico y necesita tiempo).

ESTOS SON ALGUNAS COSAS A TENER EN CUENTA EN AUTOFLORECIENTES, AL FIN Y AL CABO NO SE DIFERENCIAN TANTO DE LAS NO AUTOFLORECIENTES.

viernes, 6 de abril de 2012

Cultivar en coco


La fibra de coco es un producto natural y ecológico derivado del fruto de la palmacea "Cocus Nucifera", es un material extraido de la cascara del coco puesto a punto para su empleo en plantas hortícolas, ornamentales y por supuesto en cannabis, ideal para mezclar con cualquier tipo de tierra o bien para emplearla sola en cultivos hidropónicos.

Metodo de producción:
La fibra de coco viene de Asia donde los cocoteros crecen de forma abundante. Cada coco contiene unos 125 gramos de fibras y con la extracción de esas fibras de la cáscara, se producen ademas unos 250 gramos de polvo de coco(esencial para semilleros). Este material se lava y se seca antes de comprimirlo en bloques, facilitando su transporte. una vez llegado a su destino es sencillo devolverlo a su estado natural remojándolo en agua.
Ecológico: las reservas mundiales estan estimadas en 40-80 millones de m3 y anualmente se añade aproximadamente 1-1,5 millones de m3. Es un producto resultado del aprovechamiento de partes que no se utilizan en la producción de otros productos que antes se desechaban como residuo y solo se utilizaba para quemarlo , por los que junto con la abundandia dan a este producto un precio muy bajo . Ademas despues de su uso se puede repartir por otras tierras lo cual representa una ventaja respecto de otros sustratos, ya que es más facil desacerse de él.
La fibra de coco es un medio de cultivo inerte ,limpio , no se pudre , no produce hongos , es un excelente aislante tanto termico como acustico por lo que proporciona una perfecta proteccion para las raices , retiene gran cantidad de agua y de aire , el coco puede retener 8 o 9 veces su peso en agua sin perder una alta relacion de aire en el sustrato y capacidad de aireacion ,la fibra de coco proporciona mayor espacio de crecimiento para las raices ademas de un rapido desarrollo en comparacion con otros sustratos , lo que permite cultivar plantas de mayor tamaño en espacios mas pequeños .por lo que es un medio escelente para el cultivo hidroponico .


Después germinar semillas/enraízar esquejes
Una vez pasamos las semillas germinadas al coco, ya sea desde lana de roca, saquitos de turba o semilla directamente, no debemos apretar el coco que le ponemos a la maceta, simplemente una mínima presión para que se asiente, o meter el coco en la maceta con la plántula, regar, cuando riegas el coco se "agacha" y esa es la compactación ideal, cuando se agache, volvemos a llenar los huecos que nos queden, volvemos a regar y así hasta conseguir el nivel deseado de coco.
Es importante que sepáis que los primeros riegos deben ser ligeros, no empapar toda la maceta, así, ayudaemos a la planta a enraizar mejor y dejaremos que las raíces respiren, si empapamos la maceta, al tardar más en secarse, las raíces respiran peor y se pueden pudrir

Riegos
El riego, se hace prácticamente igual que en tierra, cuando se sequen dos o tres centímetros de la superficie, a regar. En coco se ve muy bien el momento del riego, el coco de la superficie, se pone muy claro, bueno, pues cuando lo ves así, metes el dedo, si en dos centímetros está igual, a regar, si no, esperamos un poco, aún tiene humedad.
La forma de regar, al igual que en la tierra, es echando agua de riego hasta que empiece a drenar bien por debajo de la maceta, la diferencia es, en coco puedes echar más rápido el agua, la absorbe más rápido que la tierra.
El ph idóneo para el riego es, para crecimiento, 5.8 y para floración, 6.0, esto para los que tenéis medidor digital, si tenéis uno de gotas, ambos a 6.0, son también válidos. Últimamente estoy comprobando que, en las últimas semanas de flora, es bueno subir el ph a 6.2-6.3

Abonos
El abonado en coco debe ser en cada riego, recordad que el coco es un sustrato inerte, carece de alimentos, y se lo debemos dar nosotros. Las medidas que os voy a dar a continuación, las tenéis que dividir por la mitad en los dos primeros riegos, para que la planta se acostumbre al abono poco a poco, se podría hacer de golpe, pero hay plantas que no lo toleran bien. Según la experiencia de algún forero, es mejor que los primeros riegos se hagan sólo con agua, cuando la planta tenga un buen par de hojas reales, empezaremos con la mitad de la dosis, a partir de ahí, iremos subiendo hasta llegar a la dosis deseada.


Crecimiento
  - Abonado con hesi coco:
Hesi coco es un abono específico para coco, el cual, es un sólo producto bastante cómodo de utilizar y con buenos resultado.
las medidas a utilizar durante el periodo de crecimiento son 3ml/l en todos los riegos.
  - Abonando con b-cuzz de atami:
Este, se compone de dos productos, coco A y coco B, muy contento con los resultados que me dio en anteriores cultivos. Las medidas a utilizar durante el periodo de crecimiento son 1ml/l de coco A y 1ml/l de coco b
Floración
  - hesi coco:
durante los primeros 15 días del periodo 12/12 5ml/l en todos los riegos.
El resto del periodo de floración, 3ml/l.
  - b-cuzz de atami:
durnate los primeros 15 días del periodo 12/12 2ml/l de coco A y 2ml/l de coco B.
El resto del periodo de floración, 1,5ml/l de coco A y 1,5ml/l de coco B

Tened en cuenta que cada planta es un mundo, así que, para algunas estas dosis estarán bien y para otras serán mayores o menores, esto lo tenéis que ver según la evolución de la planta.

Estimuladores
  -raíces
El estimulador de raíces, se lo pondremos en los dos primeros riegos, para ayudar al desarrollo del sistema radicular, ojo, sólo en los dos primeros riegos, si no, se nos llenará de raíces la maceta desde el principio, debemos dejar algo de espacio para que la planta siga desarrollándolas durante el crecimiento y la floración.
Si hiciéramos algún trasplante, si te lo montas bien no será necesario, le daríamos complejo radicular el siguiente riego después del trasplante.
Yo, el único que he utilizado hasta ahora, aún me dura, es el de hesi en la medida de 4ml/l mezclado con el abono.
  -floración
Estimulantes de floración son aquellos que ayudan a la planta a echar más flores, que, al fin y al cabo, es lo que nos interesa, no es estrictamente necesario, pero como digo con otros productos, si es recomendable.
Yo he utilizado dos marcas:

bloei estimulator de atami este se debe administrar en cada riego, junto con el abono, en la proporción de 1ml/l, desde el mismo momento que empezamos con el fotoperiodo 12/12, a mí, personalmente, me fue muy bien, lo malo, comparado con el delta9 es la comodidad, hay que administrarlo en cada riego.

Delta9 este es más cómodo de administrar, ya que sólo se administra cada 10 días.
Yo empiezo con la primera aplicación foliar (4ml/l) 10 días antes de pasar al fotoperiodo 12/12, justo el día que cambiamos el fotoperiodo, lo doy la segunda aplicación folira, a los 10 días de esta segunda aplicación, le doy la tercera. Esta es la última aplicación foliar de delta9 que se le debe de dar. 10 días después de la tercera aplicación foliar, se le vuelve a administrar otra vez el delta9, pero, esta vez en el riego(4ml/l igual), mezclado con el abono, cada diez días se le debe dar delta9 hasta que queden 15 días, más o menos, antes de cortar, que dejaremos de dárselo, estos últimos no son estrictamente necesarios, de hecho, hay gente que estos no se los dan, ahí, vosotros decidís
.
Un colega y yo, tenemos una pequeña discrepancia, yo el primer foliar, se lo doy 10 días antes de pasar a fotoperiodo 12/12, él, se lo da 10 días antes de que la planta se ponga a florar, esto es, entre una semana y 10 días después de pasar al fotoperiodo 12/12, por los seguimientos, se ve, que a los dos nos va bien, así que, vosotros decidís cual os gusta más.

  -engorde de cogollos
Para el engorde de cogollos, se suele utilizar pk 13-14 o guano de murciélago, que es rico en estos 2 elementos, yo os digo como se administra el químico, el guano no lo he usado nunca, tengo pensado, en un futuro no muy lejano, hacer un cultivo en coco totalmente orgánico, cuando lo haga y pruebe el guano, os comentaré.

Yo, se lo empiezo a administrar, una vez se ven los cogollos, más o menos, a partir de la cuarta semana de periodo 12/12.
La dosis a utilizar de pk 13-14 es, en el primer riego que se lo demos, 0,5ml/l, en el segundo, 1ml/l y, en el tercero y hasta el final, 1,5ml/l, una vez que le estemos dando la dosis máxima, tenemos que vigilar atentamente las plantas, al menos, una vez al día (creo que esto no es problema), si vemos que las hojas empiezan a coger forma de garra, debemos suprimir el abono y darle sólo el pk, con eso llegarán al final de flora sin problemas.

Lavados de raíces
  -cuándo
El coco es un sustrato que retiene muchas sales, por ello, es recomendable hacer un lavado de raíces cada 25-30 días durante toda la vida de la planta, ayudaremos a evitar esa acumulación de sales.

Al final del cultivo, como entre 7 y 10 días antes de cortar, sólo le haremos lavados de raíces, dejando de abonar por completo, así, aparte de dejar el sustrato sin sales, ayudará a que la planta se alimente de los elementos móviles de las hojas grandes, perdiendo la planta casi todas las hojas grandes, conseguimos con ello que, nada más secar, podremos empezar a fumar sin, apenas, rascar nada la yerba.

  -cómo
Para hacer un lavado de raíces, debemos regar las macetas con el triple del volumen de tierra que tengamos en la maceta, esto es, si tenemos 3l de coco, debemos regar con 9l de agua.
Yo personalmente, en los lavados antes del corte, no le corrijo el ph, ya que quiero que la planta no absorba ningún nutriente del sustrato, si no, que se alimente de las hojas, pero vamos, si queréis ajustar el ph, no es malo, se puede hacer perfectamente.

Tamaño de macetas

  -S.O.G (técnica de mar verde)
Para este tipo de cultivo, necesitamos tener el tamaño mínimo posible de maceta, para poder meter el máximo número de macetas en el mismo espacio.
Si queremos tener macetas de, entre, 25 y 50cm (este es el tamaño de la planta cuando acaba su vida) con macetas de 1l tendremos suficiente.
Si queremos plantas más grandes, con macetas de 2l estará más que bien.
Con macetas más grandes para el sog, creo, que no estamos haciendo otra cosa que perder espacio para optimizar el sog.

  -S.C.R.O.G (técnica de pantalla verde)
Para el cultivo scrog, esto son suposiciones, cuando haga uno daré resultados más concretos, creo, que con macetas de entre 5 y 7l litros, tendríamos suficiente, son unas macetas enormes para el coco.

  -cultivo "normal"
Bueno, este es el apartado más relativo de todos, aquí dependerá del tamaño que queramos que alcancen nuestras plantas, creo que nunca más de 7l, ya que con más, podríamos tener plantas monstruosas y, en interior, eso no interesa, de hecho, si nos pasamos con el crecimiento en las macetas de 7l, se nos podría ir de las manos, creo que un buen tamaño es 5l. Últimamente, estoy cultivando con macetas de 3l y saco buenas plantas sin que haya saturación de raíces, siempre, cuando corto, me fijo bastante en estos detalles.

Transplantes
Trasplantar en coco, es igual de fácil que en tierra, simplemente tener cuidado de que no les dé mucha luz directa a las raíces cuando estemos cambiando de maceta y listo, esto no tiene mayor complejidad. Ya sabéis, en el siguiente riego después de trasplantar, debemos añadir estimulador de raíces.

Carencias y excesos

  -como corregir (en la medida de lo posible)
Bueno, este apartado es el más simple, al menos, a mi modo de ver.
Si tenemos un exceso, lo primero que debemos hacer es un lavado de raíces, y en el siguiente riego después del lavado, darle, sólo, la mitad de la dosis de abono, a partir de ahí abonar normalmente, pero teniendo en cuenta que, si hemos sobrefertilizado antes, la dosis que estabamos utilizando era excesiva, así que, deberemos bajar un poco la dosis.
Si tenemos una carencia, corregirla es tan simple como aumentar, un poco, cuidado, la dosis de abono.

  -como evitar
Para evitar sobrefertilizaciones, nos debemos ceñir a lo que el fabricante nos recomienda y abonar con el mínimo recomendado, si empezamos a ver carencias, la aumentaremos ligeramente, hasta conseguir la medida justa de abono en el agua del riego.

martes, 3 de abril de 2012

Antes de introducirte en la hidroponía

Ayer vino un amigo mio nada contento con el rendimiento de su dutch pot hydro. Decía que el cultivo en hidro es una estafa para sacarnos a los amantes del cultivo la pasta. Y cuanta razón lleva: que si hace falta un medidor de EC, que si un medidor de PH, que un filtro de osmosis inversa etc... Pero por otro lado, yo sé que gracias a esta nueva filosofía de cultivo paises como holanda o australia han inundado los mercados europeos i asiáticos (respectivamente) con su producción de hortalizas (se nota y mucho la diferencia en la cosecha entre el método tradicional y el hidro). Así que me puse a investigar por internet, y me topé con este post interesante del compañero "7b" de los foros de lamarihuana.com, que me pareció conveniente compartir con todos. Ahi va:

El cultivo hidropónico ya no es una tecnología del futuro 
A menudo, cuando hablamos de cultivo hidropónico, no descubrimos en nuestros interlocutores ningún signo de reconocimiento. 
Y cuando explicamos que se trata de un cultivo directo en el agua, sin tierra y por añadidura en plástico, captamos esa mirada de tierna incredulidad o cargada de escepticismo, incluso de desaprobación. 
Y sin embargo nuestra tecnología representa uno de los desarrollos más sensacionales de los últimos años. Por otra parte, ya tiene un auge formidable en Australia, Canadá, en los Estados Unidos, Holanda e Israel, por citar los países más conocidos. 

¿Qué es el cultivo hidropónico?
La hidroponia es el arte de cultivar las plantas en el agua. La palabra viene del griego " hydro = agua ", y " ponos = trabajo ". El concepto ha sido " reinventado " en la universidad de Berkeley, en California en 1930, por el Dr. W. E. Gericke. 
Pero este método de cultivo existe desde la noche de los tiempos.
Todos hemos oído hablar de los jardines colgantes de Babilonia, pero también aquellos pueblos que viven al borde de lagos de altas montañas como el "Titicaca" en Perú o el "Inle" en Myanmar, que cultivan sus huertos en paja sobre la superficie del agua, las colonias de jacintos de agua, o cualquier otro substrato local. 
En el cultivo hidropónico, como en los lagos de montaña, las plantas viven por encima del agua y sus raíces están bañadas por una corriente dinámica de solución nutritiva. 
A pesar de que una cierta cantidad de plantas como el arroz, los nenúfares o algunas plantas carnívoras se han adaptado bien a un medio poco oxigenado o enrarecido, la mayoría muestra poca tolerancia al deficiente suministro de oxígeno. 
En efecto, cuando a una planta le falta oxígeno en su zona de raíces, se asfixia, aunque esté perfectamente regada. Una causa recurrente de la mortalidad de plantas de interior es debida justamente a un exceso de riego. Esto también suele ocurrir a menudo con el "hidrocultivo" (no confundir con el hidropónico), un sistema de cultivo en bandejas con mechas sumergidas en una solución nutritiva generalmente "dormida".
Las plantas se pueden desarrollar pues en el agua, pero las condiciones son importantes: es necesario que ésta sea "viva". 
Hay que saber que, sea cual fuera el medio en el que se encuentren, tierra, aire o agua, las plantas absorben su alimento bajo forma de iones disueltos en presencia de oxígeno. En el agua, a medida que el alimento y el oxígeno se consumen, es necesario reemplazarlos. Es la misión de la hidroponia, sistema de cultivo fuera de la tierra, que estimula el crecimiento de la planta controlando la calidad del agua, los minerales y sobre todo el oxígeno disuelto en la solución nutritiva. 
El concepto básico es muy simple: cuando las raíces de una planta están suspendidas en agua en movimiento, absorben el oxígeno rápidamente. Si el contenido de oxígeno es insuficiente, el crecimiento de la planta será más lento. Pero si la solución está saturada, el crecimiento de la planta se acelerará. La misión del cultivador es coordinar la aportación de agua, abono y oxígeno con las necesidades de la planta en forma optimizada para obtener un rendimiento excelente y productos de la mejor calidad. 
Por ello se deben tener en cuenta algunos factores esenciales como la temperatura, el grado de humedad, la intensidad de la luz, el nivel de CO2, la ventilación, la genética de la planta, etc., tal como lo haría cualquier jardinero atento. 

¿Y las ventajas? me dirán ustedes 
El cultivo hidropónico atañe a un público muy amplio: los "simples" enamorados, los coleccionistas privados o dueños de viveros, los cultivadores en pequeños, medianos o grandes invernaderos. A éstos se suman los centros de investigación más diversos, escuelas y asociaciones. Brevemente, a todos los apasionados de las plantas. 
Sus aplicaciones son múltiples y sus ventajas también :
  • Uso óptimo del potencial genético de una variedad. 
  • Mejor control de la nutrición de la planta. 
  • Clara mejora en el rendimiento de la calidad. 
  • Reducción significativa del ciclo vegetativo - producción para ciertas especies. 
  • Utilización más eficaz del espacio. 
  • Excelente tasa de logros en expansión. 
  • Importante economía de abono y sobre todo de agua, en un planeta donde la falta de agua comienza a ser seria.
  • Ausencia total de herbicidas, por cierto. Algunas veces se utilizará la lucha integrada para evitar fungicidas y pesticidas. 
El vigor y la duración de vida excepcionales de las plantas que comienzan en cultivo hidropónico y son transplantadas más tarde a la tierra abren unas perspectivas comerciales enormes, sobre todo en el sector de la planta en tiesto. 
En la enseñanza, a todas las edades, el cultivo hidropónico maravilla tanto a los grandes como a los pequeños. 
En fin, el cultivo hidropónico ha permitido enormes adelantes en el conocimiento de las plantas, particularmente en lo que se refiere a su nutrición. Después de 50 años, este método es utilizado en todos los grandes centros de investigación por su fiabilidad, su precisión y la diversidad de sus aplicaciones. 
Como todas las cosas, el cultivo hidropónico puede tener resultados buenos o malos, según quien lo ponga en práctica y los fines que persiga. 
Puede servir para el cultivo en masa y producir tomates sin sabor y rosas sin perfume. Pero también puede dar productos de la mejor calidad nutritiva, perfumados y plenos de sabor. 
Puede ser un factor de polución, pero también puede ser aplicado con respeto a la naturaleza y del medio ambiente, alimentar una gran parte del planeta y permitir a países en vías de desarrollo producir sus propios cultivos, aunque su suelo no sea fértil y su agua escasa. 
Otra pregunta se refiere a la etiqueta de los productos cultivados, si son biológicos o no. No lo son. Una homologación "bio" no es factible pues se trata de un cultivo "fuera de la tierra ". En lo que concierne al abono no existen aún, según mi conocimiento, verdaderos abonos "biológicos" para hidroponia. Pero lo que es cierto, es que existen en el mercado abonos hidropónicos cuya formulación está tan exactamente dosificada, que no dejan en la planta ni residuos tóxicos ni metales pesados. 
Hoy en día las variantes de nuestra tecnología son numerosas: NFT, Drip System, Ebb & Flow, Aero-hidroponia. Ellas son aplicadas cada vez más en los países industrializados. 
En muchos países del tercer mundo hay equipos de ayuda para núcleos poblados para construir sus propios sistemas de cultivo hidropónico con productos y abonos de recuperación doméstica. 
Una descripción detallada sería aquí demasiado larga, pero podrá obtener más información en la dirección al final del artículo. Y si usted va a la Cité des Sciencies de París, podrá ver una cierta cantidad de los sistemas más mejorados de esta industria expuestos en la sección "La Serre, jardin du futur " (El invernadero, jardín del futuro).
Cualquiera sean los métodos aplicados, la tecnología se utiliza hoy en forma industrial y está unida esencialmente a la producción en invernadero. En Australia, por lo menos el 90 % de las lechugas y tomates son producidos siguiendo este método. Los australianos invaden actualmente el mercado superpoblado del sur de Asia con una enorme cantidad de frutas y legumbres hidropónicas. 
La hidroponia tiene también otros campos de aplicación, en especial en el cultivo de interior y en la jardinería. En los Estados Unidos, después de veinte años, hay fabricantes que se esfuerzan en poner a disposición del público sistemas de cultivo hidroponico a pequeña escala, utilizando las mismas tecnologías que la agricultura de invernadero. Estos sistemas están dirigidos al gran público y pueden instalarse en un balcón, una galería o un patio, también en interior frente a una ventana bien expuesta, o en un espacio cerrado, bajo una lámpara. Van desde el módulo para una sola planta hasta verdaderos huertos a escala.
Es verdad que ciertas técnicas no pueden ser aplicadas por cualquier persona. Un error corriente es creer que, ya que las plantas disponen de una reserva de agua, se las puede dejar sin cuidados durante largo tiempo. De hecho, su metabolismo acelerado requiere una cierta atención. Estos métodos no le harán ganar tiempo en el mantenimiento de sus plantas, pero sí le permitirán maximizar los resultados. En este sentido, el cultivo hidropónico está dirigido a los apasionados de las plantas y a los coleccionistas, ya sean principiantes o profesionales, antes que al jardinero ocasional. 
Seguramente que el concepto de hidroponia pueda parecer inconcebible para muchos. Otros pensarán que es una nueva moda… Habrá curiosos, divertidos o interesados…

lunes, 2 de abril de 2012

Como saber la calidad de enzimas que usamos ?


Hola chicos,
Navegando ayer por internet, me tropezé con este artículo publicado esta sección de la web del banco de semillas MedicalSeeds, y como siempre pensé que era adecuado darle más difusión ya que me parece útil.
ahi va el artículo:

Las enzimas son moléculas de proteínas que tienen la capacidad de facilitar y acelerar las reacciones químicas que tienen lugar en los tejidos vivos, disminuyendo el nivel de la "energía de activación" propia de la reacción. Se entiende por "energía de activación" al valor de la energía que es necesario aplicar (en forma de calor, electricidad o radiación) para que dos moléculas determinadas colisionen y se produzca una reacción química entre ellas. Generalmente, las enzimas se nombran añadiendo la terminación "asa" a la raíz del nombre de la sustancia sobre la que actúan.

Las enzimas no reaccionan químicamente con las sustancias sobre las que actúan (que se denominan sustrato), ni alteran el equilibrio de la reacción. Solamente aumentan la velocidad con que estas se producen, actuando como catalizadores. La velocidad de las reacciones enzimáticas dependen de la concentración de la enzima, de la concentración del sustrato (hasta un límite) y de la temperatura y el PH del medio.

Cuando un compuesto se transforma en otro, de diferente naturaleza, se ha producido una reacción química. El proceso de transformación ocurre a una determinada velocidad, que depende de varios factores. Así, cuanto mayor sea la cantidad del compuesto inicial más rápido será el proceso. También influye la temperatura, cuya elevación acelera las reacciones químicas. En este sentido es sobradamente conocido el hecho de que una baja temperatura preserva los alimentos frente a una reacción de descomposición. Así mismo, la presencia de un catalizador modifica la velocidad de una transformación química. Estas sustancias no pueden lograr el que se produzca una reacción imposible, pero sí que una casi imperceptible suceda a una velocidad muy apreciable. Por ello los catalizadores son muy útiles en la industria química. Su efecto lo promueven de diferentes maneras. En cierto modo actuarían como una polea que facilitase el que se pudiera mover un pesado objeto.
 
Los seres vivos tienen catalizadores para las reacciones que ocurren en sus células. Se trata de las enzimas, que son proteínas que tienen una actividad catalítica. Todas las transformaciones que ocurren en las células hacen uso de enzimas concretas, habiendo un número incontable de éstas.
Las enzimas son, por tanto, esenciales en los procesos químicos de todos los seres vivos, tanto animales (el proceso de digestión sería impensable sin su existencia) como vegetales. Obviamente, en este artículo nos centraremos en estos últimos.


Las raíces de las plantas sanas, a medida que crecen, forman un complejo sistema reticular en el que, al igual que las células, algunas raíces van muriendo mientras se crean otra nuevas. Sin embrago las raíces muertas son un excelente caldo de cultivo para la creación de agentes patógenos, peligrosos para la salud futura de la planta, ya que estos agentes forman un moho que se extiende por el tejido inerte amenazando las raíces sanas. Cuando estas son infectadas por el moho patógeno sus funciones primordiales se ven afectadas lo que provoca que la planta entre en un proceso de estrés que inhibe el crecimiento.
Las enzimas, como ya hemos dicho, aceleran las reacciones en los organismos vivos. En este caso, al entrar en contacto con el tejido muerto de la raíz provoca que éste se transforme en minerales y azúcares, que serán aprovechados por la raíz sana como alimento extra. No sólo eso, sino que estos minerales enriquecen el suelo, aportando nutrientes que lo mantienen en buen estado,  y permiten una mejor regulación de la circulación del agua y del aire en las raíces (las enzimas, por tanto, serán extremadamente necesarias si queremos reutilizar el substrato para una nueva plantación ya que lo mantendrá limpio y sano el medio de cultivo). Además los minerales y azúcares generados son vitales para las bacterias que viven en torno a la raíz. Estas bacterias proporcionan a la planta una protección vital contra plagas de toda clase e intercambian sustancias nutritivas y vitaminas.

Prueba de Calidad

Si bien hemos definido las características generales de las enzimas, no todas las marcas que ofrecen productos  enzimáticos son equiparables en cuanto a calidad y rendimiento. Existen dos experimentos que nos permiten descubrir cual es la mejor opción entre todas las que nos encontramos en un grow. Como no queremos dar publicidad (tanto negativa como positiva) de ninguna marca, preferimos darte los pasos a seguir en ambas experiencias y que seas tu el que, una vez con los datos en la mano, escojas el producto adecuado. Anímate, si echas de menos el quimicefa, esta es tu oportunidad de resarcirte.

Utilizaremos 6 vasos de plástico. En cada uno de ellos mezclaremos 20cl. De compota de manzana con 20cl de cada una de las marcas utilizadas . Al cabo de 12 horas lo filtraremos utilizando un filtro de café convencional. En el poso restante quedará un líquido dividido en dos partes (parecido al resultado de mezclar aceite con vinagre): En la parte central (a la manera de la yema de un huevo) quedarán las enzimas. Este resultado no es igual en cada caso. Las mejores marcas formarán una yema mayor al tener una concentración mayor de encimas.



El resultado que debemos de obtener es similar a esto :

 
En esta ocasión volveremos a verter 20cl de encimas en cada uno de los seis vasos utilizando una marca distinta en cada caso. Metemos un trozo de papel en cada vaso los dejamos reposar 24 horas. Al día siguiente observaremos el estado de degradación de los papeles: Éste será proporcional al grado de eficiencia del producto testado.

Los resultados, en un caso y el otro, no son ni mucho menos homogéneos, te sorprenderá comprobar las diferencias, a veces abismales, entre una marca y otra.*


 *Para obtener unos resultados objetivos es imprescindible que en los envases  se especifique la fecha de embotellamiento del producto. Hemos de ser muy escrupulosos en este detalle, ya que un liquido caducado deja en evidencia todo el experimento.